Gareth Bale ha pasado por muchos problemas en los últimos meses dentro del Real Madrid. Su incomodidad evidente, la mala relación del cuerpo técnico con su representante y la forma en que prioriza de manera desmedida el hecho de jugar con su selección, han sido catalizadores de las críticas blancas.
Después de pasar por una buena cantidad de momentos adversos en el Santiago Bernabéu, el extremo se ha vuelto inmune a la desaprobación del público. En una entrevista realizada por BT Sport, el Expreso de Cardiff dijo: «Aprendí a manejar los pitos».
El atacante que causó polémica por una bandera en donde se mostró irónico sobre sus prioridades, contó cómo fue la primera vez que sintió el peso del público madridista: «Creo que la primera vez que me pitaron fue un poco un shock, sorprendente. Realmente no sabía cómo lidiar con eso. Pero a medida que fui teniendo más edad, sucedió una o dos veces más, y entiendes cómo manejarlo».
Ha pasado mucho tiempo y varias batallas desde esa primera vez, por ello, reveló su manera actual de enfrentar a ese monstruo de la Casa Blanca. «Ahora sólo me encojo de hombros. De alguna manera, es el mejor lugar (el Bernabéu) para que me silben ya que si no haces una buena actuación, lo entiendo. Obviamente tengo que seguir trabajando duro y seguir demostrando a los aficionados lo que puedo hacer», decía Bale.
Bale cuenta para Zidane
A pesar de los desatinos del veloz atacante, Zidane no ha perdido la compostura y lo ha defendido cada vez que puede. La dirección deportiva y el cuerpo técnico están a favor de Bale y la misión será que recupere la credibilidad de los aficionados que lo tienen mal valorado. Zizou es consciente de que el británico estando en su mejor nivel puede potenciar al equipo mejor que cualquier alta del mercado.