El Manchester United empezó de forma inmejorable la Premier League contra el Chelsea, una goleada que apagaba algunos incendios en el club, luego del decepcionante mercado. Los aficionados empezaron a entusiasmarse con la nueva temporada, a pesar de todos los contratiempos. Para la siguiente fecha, el obstáculo era el Wolverhampton, un equipo que podía ofrecer gran resistencia por el nivel de sus futbolistas.
En el desarrollo del partido se presentó la oportunidad de desequilibrar la balanza con un penal a favor de los ‘Red Devils’. El encargado fue Paul Pogba y el resultado fue negativo, porque el balón no pudo tocar las redes. Con esto se esfumó la oportunidad de la segunda victoria consecutiva para los de Solskjær.
Rashford se favorece del error de Pogba
Al finalizar el partido, la molestia del técnico noruego era evidente y le ayudó a tomar una decisión definitiva en cuanto al cobrador de penales inamovible. La designación fue Marcus Rashford, el atacante ya había convertido desde los 11 metros contra el Chelsea y ahora se ganó el derecho permanente.
Este gesto complica la situación de Pogba en el vestuario, quien también ha recibido amenazas de algunos inadaptados los últimos días, ya que no se siente apoyado por el cuerpo técnico, al primer error no lo respaldan. El francés todavía está considerando su salida de la Premier, mientras tanto el Real Madrid se mantiene atento a su llegada. Zidane aún tiene esperanzas y restan algunos días para un milagro de última hora.
La presidencia blanca está enfocada en el difícil tema Neymar, pero si en el próximo partido del United se agudiza la crisis Pogba, el rumbo de los millones del Madrid podría cambiar. No pinta bien el escenario para el equipo de Old Trafford en esta campaña naciente.
¿Zidane tendrá finalmente a su centrocampista predilecto?